Michelle Williams se mete en la piel del sex symbol en su nuevo trabajo, "Mi semana con Marilyn".
Kate Hudson, Amy Adams y Scarlett Johansson fueron algunas de las candidatas que acudieron director Simon Curtis para encarnar el mito erótico por excelencia de todos los tiempos, pero al final sólo una de ellas consiguió llevarse el gato al agua:Michelle Williams.
La tímida actriz cambia de registro esta vez para meterse en la piel de la tentación rubia en My Week with Marilyn, en castellano bajo el título de Mi semana con Marilyn. La vida de la controvertida actriz que falleció el 5 de agosto de 1962 a causa de una sobredosis de barbitúricos, en circunstancias nunca esclarecidas está llena de altibajos. Simon Curtis se estrena como director de cine en la gran pantalla y se centra en una época muy concreta de su vida. En el verano de 1956, Colin Clark trabaja como asistente en el set de la película británica El príncipe y la corista, protagonizada por Laurence Olivier y Marilyn Monroe. El filmetrata sobre la relación entre ambos. La película se fija en la semana en la que Monroe fue escoltada por Colin Clark en Gran Bretaña, después de que su marido, Arthur Miller, abandonara el país.
Revisamos el archivo de imágenes de Marilyn para comprobar la influencia del mito en el mundo de la moda y comprobamos que algunas de las tendencias de esta temporada -topos, el abrigo blanco, cuellos chimenea y estolas de pelo- fueron inestimables recursos que utilizó la actriz en la década de los años cincuenta y sesenta para llegar hasta lo más alto
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